sábado, 19 de diciembre de 2015

Capítulo 14: Aficionados

Los seguidores de Pau son una gran parte de su vida, de su éxito, de lo que hace, del por qué hace las cosas, de por qué lleva el tipo de vida que lleva.

Sus fans le dan cariño y apoyo tanto en los buenos momentos como en los malos. Estos seguidores fieles no solo lo animan cuando las cosas van bien y juega al alto nivel, también le respaldan cuando está lesionado o cuando atraviesa una mala racha. Le valoran por quién es de verdad y lo aprecian.

Pau está agradecido por esos fans. 

Las redes sociales han abierto una puerta para interectuar con sus seguidores de una forma que antes no era posible. Es muy gratificante para él tener esa vía de comunicación con sus fans, sin importar en qué parte del mundo se encuentran.

Lee sus mensajes y responde a sus preguntas. Cuando contesta a alguna de sus cuestiones, es una manera para Pau de decir 'gracias', de demostrarles que le importa lo que tienen que decir.

Si tiene tiempo de responder a algunos seguidores, aunque sea por unos minutos, lo hace.

Es emocionante saber que tanta gente tiene interés en saber de su vida y de su carrera. Aunque también es una responsabilidad, porque todo lo que comparte a través de las redes sociales puede acabar publicado en cualquier otro medio de prensa. 

Lo divertido es que también puede compartir mucho de su vida personal y así sus fans tienen la oportunidad de conocerle mejor.

Sus fans le inspiran. Piensa que la positividad atrae positividad, así que cuando comparte mensajes positivos, ellos también se los darán. 

No todo el mundo puede estar animado y de buen humor, y eso Pau lo entiende, por supuesto, a sabiendas de que todos tenemos nuestros momentos. Pero valora a esos fans que demuestran su apoyo y admiración de forma genuina, aunque el momento no sea el más fácil para hacerlo.

La sensación de estar en una cancha de baloncesto y tener a miles de personas que están animando hace que por su cuerpo fluya mucha fuerza y energía. Sobre todo cuando se juega en casa, tener todo ese apoyo es una sensación indescriptible. 

Uno de sus mayores admiradores, con el que ha establecido un estrecho vínculo, es un niño pequeño, con una pierna protésica, llamado Ezra. Él ama el baloncesto, así que fue deseo de sus padres que se conocieran. Un programa de televisión contactó con los Lakers para facilitar el encuentro. Ellos traerían una cámara y sería una sorpresa para él.

Se conocieron antes de un partido en el Stapples Center. Entró en la sala, se levantó, y lo abrazó. Desde ese día, han desarrollado una bonita amistad. Se ven a menudo. Siempre pasan momentos muy divertidos juntos.

Es un gran chico lleno de vida. Le encanta ver partidos de baloncesto. Cada vez que se ven juegan al baloncesto, ven baloncesto y hablan de baloncesto. Es su pasión y su amor. Su espíritu es contagioso y le inspira.

Considera que tiene los mejores fans.



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